Lavabos

Si hablamos de hostelería, la higiene es uno de los elementos clave en cualquiera de sus operaciones. Es más, la falta de ella puede acabar en graves sanciones que implican incluso el cierre del establecimiento.

Por ello, resulta fundamental disponer de elementos como el lavamanos industrial. Un equipo de acero inoxidable que hace más sencillo mantener a raya la higiene en cocinas y otros espacios del negocio.

Lavamanos de acero inoxidable de uso industrial

Para cubrir esta necesidad, el mercado ofrece lavamanos de acero inoxidable de pie, murales, empotrados y autónomos. Excepto estos últimos, los demás deben colocarse donde haya toma de agua. Con lo que deberá ser la primera característica en la que fijarse antes de comprar uno de estos equipos. Pero hay más:

Grifería

Los también denominados lavabos para cocina pueden contar con grifos de pedal o electrónicos. Los primeros son aquellos que para accionarlos es preciso pisar el pedal que incorporan. Este diseño ayuda a no tocar el mueble con las manos sucias.

Por otro lado, los segundos funcionan a través de un sensor. Cuando este detecta que el usuario ha colocado sus manos bajo el grifo, se acciona.

Dispensadores

Otra de las características clave de estos mini lavabos de acero inoxidable es el tipo de dispensador que se puede instalar sobre ellos.

Los más habituales son los dispensadores de jabón. Este, se puede accionar pulsando un botón o a través de sensores. No obstante, también es posible contar con dispensadores de toallas o papel para secarse las manos.

Caudal

El caudal es el flujo de agua que sale del grifo por unidad de tiempo. El más común es de 1 o 2 litros por minuto. Cuando el grifo es electrónico es posible ahorrar hasta un 50% de agua. Sin embargo, siempre depende de baterías o energía eléctrica para funcionar.

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